El presidente cubano celebrará el 11-J como triunfo sobre un «golpe de Estado»
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, afirmó que el próximo 11 de julio -cuando se cumple un año de las masivas manifestaciones antigubernamentales- lo que «festejarán» será el «desmontaje de un golpe de Estado vándalico».
«El socialismo venció al intento de golpe vandálico», aseguró el gobernante durante una reunión con artistas y escritores cubanos, según versiona hoy el diario oficial Granma.
«Lo que realmente nosotros vamos a festejar, como un primer aniversario el 11 de julio, es que el pueblo cubano y la Revolución Cubana desmontaron un golpe de Estado vandálico», reiteró Díaz-Canel.
Señaló además que «defendiendo el socialismo, superaremos la dura situación actual y venceremos a los imperialistas».
Un artículo sobre el tema publicado en esta edición de Granma añade, por su parte, que los acontecimientos de julio formaron parte de un plan de la Casa Blanca para desestabilizar el país.
«Se trataba de una verdadera terapia de shock dirigida a desalentar cualquier resolución de resistencia y a quebrar la fe de los cubanos», según el comentario.
El mismo argumenta el «derecho, deber y tradición» de los cubanos de «defender» la Revolución.
Hace un año, se produjeron en Cuba las mayores protestas antigubernamentales en décadas, unas manifestaciones que tuvieron como principal causa la grave crisis económica que atraviesa el país.
Según la Fiscalía General de Cuba, un total de 790 personas han sido procesadas por las protestas del 11 de julio, de los que 55 tienen entre 16 y 17 años. La edad mínima penal en Cuba son los 16.
Además, se les aplicó «el procedimiento legal establecido» a 27 niños de menos de 16 años.
La ONG Prisoners Defenders, por su parte, señala que al menos 1.046 personas se encontraban hasta mayo en prisión en la isla por motivos políticos, en su mayoría por los hechos del 11 de julio.